viernes, 12 de junio de 2009

Volvé...


Qué fácil es decir algo sin pensarlo...

Qué difícil es decir algo que pensas...

Qué dificil es superar tus miedos para decir lo que sentís...

 

Más dificil aún es superar el mal llamado orgullo para

 expresar mis sentimientos... 

y lo digo así...

porque tal vez no es "orgullo" lo que me limita...

lo que me enmudece...

lo que me hace fingir ser fría o insensible...

lo que me frena de expresar lo que quiero...

sino simplemente es miedo del tamaño de una montaña...

 

Pero ayer mi miedo... fue más grande que esos miedos...

que habitan en mí desde hace tanto tiempo que 

dejaron de parecer miedos...

para transformarse en excusas...

 conclusiones... decisiones... negaciones... 

o posturas intransigentes...

esos miedos que se camuflan bajo el color del orgullo

la indiferencia, el rencor o el supuesto olvido...

 

Ayer el miedo...me hizo cruzar ríos y escalar montañas...

Ayer el miedo...me hizo vencer reticencias absurdas...

 

Te llame... te busque...necesitaba de tu protección...

de tu cariño y tu calor...di vueltas a mi alrededor...

 grite tu nombre y el silencio me respondió...

desolada, triste, sintiéndome

muy sola...volví a bajar por esa ladera empinada...

sin fuerzas...sin ánimo...

 

Sentí un gran vacío porque escalé esa montaña

con la esperanza que simplemente ante el primer

llamado mío, aparecerías como un destello de luz...

pero no fue así...y desde la cúspide... agotada... adolorida

volví tras mis pasos... 

preguntándome si en esta vida ya Vos y Yo

no tendríamos ninguna otra oportunidad...

Preguntándome...

 

 ¿Porqué?

 

¿Porqué debía ser así?  

 

¿Porqué debía finalizar así algo que tal vez nunca empezó?

 

¿Porque si Yo soy parte de Ti y Tú eres parte de mí?

 

Y de pronto cuando ya el último rayo de esperanza

se esfumaba...escuche tu voz...

supe quien eras...no necesite preguntar nada...

tenía la certeza... mi corazón me lo decía...

estabas allí sin estarlo... podía escucharte... sin verte...

podías escucharme sin verme...

 

Sin que pudieras ver en mis pupilas lo difícil que fue para mí 

estar alejada de ti todos estos años,

 con motivos valederos o sin ellos...

simplemente alejados...

rumiando los dos, tal vez temores...

tal vez rencores...

escondidos bajo falsas cortinas de indiferencias...

 

Nunca fuiste indiferente para mí...

Creo que fuiste...sos y serás mucho 

más importante en mi vida

 de lo que me imagino...

 

Me pregunto si ¿sentís lo mismo?

 

Por eso te pido que vuelvas a mí...

y no te alejes nunca más...

 

No permitas que nada ni nadie nos separe...

ni mis miedos ni los tuyos...

simplemente volvé y dame ese abrazo que 

necesito desde hace tantos años que ya perdí la cuenta...

volvé y decime que...

 

"Todo va a estar bien..."

 

"No te preocupes...Yo estoy aquí"

 

volvé y decime que... Me Querés!!!

 

déjame decirte que... Te quiero!!!

 

déjame conocerte...saber quién sos

 

déjate conocerme...saber quién soy...

 

Pero volvé de prisa porque tengo frío...

 

Volvé...y nunca más te alejes de mi

porque no se si mi corazón podrá resistir

el dolor de tu partida y peor aún el dolor de tu ausencia...

 

Volvé sin mirar atrás...volvé sin rencores ni miedos...

 

Volvé que te espero...

 

2 comentarios:

Pétalas D'Alma dijo...

Um belo texto! Parabéns!!! Um Abraço!!

*SKY* dijo...

¡¡¡Hola Celeste!!!

El miedo es el peor enemigo, nos priva de la libertad. Nunca debemos permitir que se apodere de nuestra alma porque de ser así la felicidad nunca volvera.

Muy nostalgico. ¡¡¡Saludos y besos!!!